MERCEDES URIARTE LATORRE
En el Año Internacional de la Enfermera.
son manos
de vocación, de arte y disposición.
Ellas no
entienden de edad ni razón;
y siempre
atentas en toda ocasión.
Son manos
divinamente perfectas
que dan
consuelo y van siempre abiertas.
Son manos
que espantan los miedos,
que dan
cariño y esperanza
con tan
sólo una firme y suave palmada.
Esas hábiles y sedosas manos,

no sólo
aplican inyecciones,
curan o
hacen inhalaciones;
ellas
asisten en riesgosas operaciones,
reciben al
recién nacido,
dan
cuidado integral y holístico
y, cual
sutil lamparilla turca,
llevan luz
al final del camino.
Esas
manos son las que celebran la vida
sin
importar diagnósticos ni patologías.
atienden
en tiempos de paz y de guerra.
Esas
manos, son las manos de Enfermera,
pilar
de la Salud Preventiva,
hoy
más visibles que nunca,
¡un
cálido saludo por su existencia
en el
Año Internacional de la Enfermera!
Sombrita Napelui
Sombrita Napelui
(imágenes tomadas de Internet)




