POEMA
DE GRATITUD A AYACUCHO POR DEILÚ ELIZABETH OLIVEROS SOTO.
Tras haber participado en el XXXIII Encuentro Nacional de
Literatura Infantil y Juvenil, realizado en la ciudad de
Ayacucho, del 27 al 31 de octubre de 2014.
A raíz de esta breve visita, la poeta plasmó un bello poema a Ayacucho,
para deleitarnos y tributarle con sus versos a la histórica ciudad
de campanarios.
Nuestra gratitud a
Deilú Elizabeth Oliveros Soto. Por sus versos y su visita a la ciudad de las
treinta y tres iglesias.
¡Vuelva pronto poeta!...
¡Ayacucho tierra hermosa! (*)
Ayacucho tierra hermosa, de
corazón indomable que luce su gesta histórica de orgullo y de tradición,
con sus almas generosas que hacen vibrar mi pasión. Ayacucho, digno
pueblo de gracia y de esplendor, pintaste flor y suspiro en mi
humilde corazón, escondiendo cautelosa una bella tradición
entre mágicos retablos y textiles de color. Gracias noble tierra
andina de sensible corazón, por cobijar con ternura nuestra
humilde inspiración.
Agradecidos estamos por
permitirnos gozar de tu mística grandeza, tu hermosura y tu
canción, junto a una suave caricia que desliza en la mañana y
se viste de esplendor.
Ayacucho, tus
recuerdos fecundan en mi memoria un rico bagaje cultural de arte y
de tradición, que se muestran orgullosos en tus
retablos de ensueños, tus tallados de alabastro, tus delicias de
alfarero y tus tejidos de historia que embellecen mi soñar;
junto a tu gente valiente y generosa que hace inspirar mi
canción.
Ayacucho bella tierra,
con tu traje colorido te llevaré grabada por siempre en mi corazón, cual
pupila bendita que cincela una mirada en el ayer, en el ayer de una hermosa
mañana Huamanguina que se oculta entre suspiros de
retamas y el silencio de un valeroso pasado , el
cual se quedó dormido en la “morada del alma” de mi
Ayacucho aguerrido.
Gracias APLIJ –AYACUCHO en la
persona del señor Marcial Molina, dignas autoridades de la UNSCH y
organizadores, nuestra gratitud y respeto por siempre.
A mi querido Ayacucho
En las piedras de Huamanga
dejaré mi corazón
ceñidito a tu recuerdo
a un verso y a una canción.
dejaré mi corazón
ceñidito a tu recuerdo
a un verso y a una canción.
Huamanguino de mi vida
regálame tu canción
con delicias de retama
que acarician mi pasión.
En tu ponchito de lana
cobijaré mi recuerdo,
abrazando la mañana
que suspira en mi desvelo.
Huamanguino de mi vida
no me dejes sin canción
y regálame esta noche
¡ muyuchi de corazón !
Con gratitud y cariño:
Deilú Elizabeth Oliveros Soto.
Gracias Ayacucho.